Aquí hay algunos puntos a tener en cuenta al utilizar el pensamiento y el diálogo argumentativo en la filosofía:
- Claridad de pensamiento: El pensamiento claro y riguroso es esencial para la filosofía. Es importante asegurarse de que los conceptos y argumentos estén bien definidos y que se entienda completamente lo que se está debatiendo.
- Abierto a diferentes perspectivas: La filosofía es un diálogo, y es importante estar abierto a diferentes perspectivas y puntos de vista. Escuchar y considerar cuidadosamente los argumentos de los demás puede ayudar a expandir la comprensión y perspectivas propias.
- Argumentación sólida: La argumentación sólida y bien estructurada es esencial en la filosofía. Los argumentos deben ser claros, lógicos y apoyados por evidencia o razones convincentes.
- Respeto y cortesía: El diálogo argumentativo debe llevarse a cabo con respeto y cortesía hacia los demás. Es importante ser crítico con las ideas y argumentos, pero no con las personas mismas.
- Reflexión y autocrítica: La filosofía también implica la reflexión y la autocrítica. Es importante considerar cuidadosamente las propias creencias y prejuicios y estar abiertos a cambiar de opinión a la luz de nuevos argumentos o evidencia.
Argumentar y razonar. Cómo enseñar y evaluar la capacidad de argumentar. Libro de Félix García Moriyón (editorial CCS, Madrid, 2007).